Algunos asumen el reto de buscar una nueva casa mientras todavía no se han desprendido de la anterior, ¿es factible? Pues sí. Muchas personas tienen éxito en esta misión y les sale la jugada redonda. No obstante, es cierto que vender y comprar casa al mismo tiempo no es un asunto fácil. Conviene tener en cuenta unas recomendaciones importantes. Además es importante tener en cuenta cuánto se tarda en vender un piso en España.
Una de las principales ventajas de este método es que quienes se decantan por él se ahorrarán declarar en el impuesto del IRPF la ganancia patrimonial obtenida con la venta de la casa anterior. No en vano, ese dinero se destina a la compra de otra vivienda y, por lo tanto, nos veremos libres de este trámite.
Además, podrás beneficiarte de la exención por reinversión en vivienda habitual, porque, aunque es cierto que existen las llamadas hipotecas puente, debido a sus elevados intereses no son la opción más aconsejable.
Eso sí, recuerda que antes de lanzarte a la firma de la nueva vivienda debes asegurarte de que existe un serio compromiso e inminente por parte de un tercero de adquirir la antigua. De lo contrario, te expones a quedarte con ambas o, peor, a pagar la señal que hayas dado por la nueva.
El escenario más habitual es que hayas encontrado un comprador para tu casa y que incluso hayáis firmado el correspondiente contrato de arras. Es en ese momento cuando puedes acordar un plazo de tiempo prudencial (por ejemplo, de 5 o 6 meses) para que puedas buscar y comprar una nueva vivienda. Mientras eso sucede, podrás seguir viviendo en tu casa. Eso sí, no te duermas en los laureles y sondea las posibilidades que te ofrece el mercado inmobiliario.
Si estuvieras ante ese supuesto, lo que es bastante frecuente, te recomendamos que trates de realizar una oferta por esa casa y que no dudes en formalizar una promesa de compraventa. Este documento, aunque las partes tienen libertad para fijar su contenido, suele constar de lo sigue:
En cualquier caso, comprar y vender casa al mismo tiempo también tiene sus contrapartidas. Así, uno de sus mayores inconvenientes es que el proceso puede demorarse mucho debido a que no encuentres un comprador interesado en tu casa actual. De hecho, esta circunstancia puede incluso suponer que te toque incumplir el contrato de promesa de compraventa y que debas indemnizar por los daños y perjuicios a la otra parte.
Por último, te recomendamos que sopeses todos los factores antes de optar por esta posibilidad. Seguro que, si tu vivienda resulta atractiva, y el precio que pides por ella es justo, no tardarás en recibir ofertas que te permitan dar el salto hacia tu nuevo hogar.