Consejos para ahorrar luz en tu vivienda con la subida reciente de la electricidad

En los últimos meses, estamos asistiendo a una escalada de precios sin precedentes que no solo afecta a la luz, sino también al gas. Unos incrementos que, lejos de amainar, parecen no tener límites, por lo que ha llegado la hora de adoptar nuevos hábitos de consumo e incluso invertir en electrodomésticos eficientes que nos permitan rebajar de una manera considerable el consumo.

Empezamos con la iluminación

Una de las medidas más evidentes es apostar por la luz natural. Si subimos las persianas y descorremos las cortinas, además conseguiremos caldear la estancia durante el invierno y evitar recurrir a la calefacción o reducir el gasto sustancialmente.

Cuando tengamos que encenderlas, debemos procurar que sean luces LED, pues son las que menos consumen. En este sentido, su vida útil es muy superior con respecto a los modelos tradicionales, pues puede llegar a las 40.000 horas. 

Así y todo, conviene aguardar a que se estropeen las anteriores y no desecharlas cuando todavía funcionan e ir sustituyéndolas de manera paulatina.

¡A hacer la colada!

A la hora de lavar la ropa, debemos tener en cuenta una serie de consejos que nos ayudarán a reducir la factura. Siempre que las manchas a eliminar lo permitan, debemos:

• Lavar con el tambor siempre lleno.
• Lavar en ciclos cortos con agua fría.

De igual modo, si es posible, conviene evitar la secadora y tender la ropa al aire libre. No hay manera más ecológica de secar las prendas. Además, evitaremos que se estropee, ya que algunos tejidos no admiten el uso de secadora y las altas temperaturas deterioran con el tiempo los textiles.

Por otro lado, tampoco hay que demorarse mucho en tender las prendas, pues la ropa no solo absorberá malos olores, sino que también se arrugará más y necesitaremos usar la plancha, con el consiguiente consumo de energía. Para evitarlo, te recomendamos seguir los siguientes consejos!

• Se debe sacudir la ropa antes de tenderla para que se deshagan los posibles pliegues y no queden dobleces una vez tendida.
• La ropa debe tenderse respetando su forma natural.
• Las pinzas han de colocarse en zonas en las que sea fácil disimular su marca sobre la tela para evitar la necesidad de un planchado exhaustivo.
• Una vez que la ropa se ha secado, debemos destenderla cuanto antes. Con ello, al igual que antes de tenderla, evitaremos que se arrugue y que coja malos olores.
• Por último, deberemos guardarla convenientemente plegada en el armario o en su percha. 

En cualquier caso, si emplear la secadora es inevitable, siempre es preferible utilizar un programa para prendas delicadas con una temperatura no muy alta, ya que así se formarán menos arrugas y nos ahorraremos el planchado.

Presta atención a la calefacción

A veces una capa de polvo sobre los radiadores puede perjudicarnos más de lo que parece: ¿Sabías que mantenerlos correctamente limpios puede ayudarte a ahorrar hasta un 10 % de energía?

Procura, asimismo, evitar colocar objetos cerca de los radiadores, pues podrían interferir y obligar al radiador a trabajar aún más.

Correcto uso del frigorífico

Con respecto al uso de la nevera, podemos tomar medidas de ahorro muy efectivas::

• Controlar regularmente la temperatura. Se recomienda +5°C para la zona de refrigeración y -18°C para la de congelación.
• Ubicarla correctamente es primordial. Así, se desaconseja instalarla al lado de hornos o aparatos que irradien calor.
• Mantener el congelador lleno, pues esto ayuda a consumir menos.
• Comprobar que no haya fugas.
• No debemos introducir platos calientes en la nevera hasta que se hayan enfriado.
• Mantener la nevera llena, pues una vacía gasta más.
• No abrir constantemente la nevera. 

Usa el lavavajillas, pero con cabeza

Si tienes un lavavajillas, estos consejos te permitirán ahorrar no solo energía, sino también agua:

• Enciende el lavavajillas únicamente cuando esté lleno.
• Activa el botón "eco", que puede reducir el consumo de electricidad hasta en un 45 %.
• No hagas un prelavado. Retira los posibles restos con la ayuda de una servilleta a medio uso antes de guardarlos.

Y un cajón de sastre de consejos

Para terminar, os recordamos algunas pautas que solemos ignorar y que pueden ayudarnos a ahorrar más de lo que habíamos pensado:

• Tapa las ollas de agua mientras esperas a que el contenido empiece a hervir. 
• Usa el microondas para calentar la comida, pero procura descongelarla en el interior de la nevera con la debida antelación.
• No abras la puerta del horno muchas veces mientras cocinas y recuerda limpiarlo con regularidad.

Si bien es cierto que el actual precio de la luz complica sobremanera la tarea de ahorrar, estas medidas te ayudarán a conseguirlo.