De nuevo, tenemos ante nosotros el ilusionante momento de decorar la casa para recibir a la Navidad. Aunque para algunos supone todo un reto y se lanzan con entusiasmo a la tarea, otros necesitan ideas e inspiración. Si estás en el segundo grupo, en este post te contamos cómo adornar un árbol de Navidad.
A primera vista, parece una tarea sencilla y divertida, sobre todo para los más pequeños, pero ciertas pautas nos ayudarán a obtener un resultado mucho más espectacular. A continuación, te las desvelamos:
Debemos guardar cierto orden a la hora de colocar los adornos, pues este pequeño detalle puede ser fundamental. Por este motivo, es conveniente comenzar por las luces, ya que así podremos integrarlas mejor e incluso esconderlas. Recuerda que hay que comenzar de abajo a arriba y, poco a poco, ir dando vueltas al abeto. ¡Y procura que sean luces led!
Otro recurso decorativo que nunca falla son las cintas, pero no debemos lanzarlas a lo loco como si fueran serpentinas. Al contrario, vamos a tomárnoslo con calma, porque es recomendable ponerlas después de las luces y antes de los adornos. Podrás situarlas de manera transversal o en vertical y, por supuesto, escoger entre los diferentes materiales y diseños existentes: rafia, tul, con brillo…
Toca colgar los adornos en el árbol. También con respecto a esto debemos atenernos a una serie de normas que nos ayudarán a conseguir el mejor resultado posible con los materiales de los que dispongamos. En este sentido, te aconsejamos que coloques en primer lugar los adornos más grandes y que reserves los más pequeños para el final.
Para algunos supone toda una tradición rematar el abeto con una brillante estrella de Navidad. Además, muchos reservan su colocación a los niños más pequeños de la casa, ya que son quienes más disfrutan del acontecimiento.
Detalles como poner unos regalos de atrezzo bajo el árbol pueden quedar francamente bien. Podrás aprovechar cualquier caja de zapatos, o una de los múltiples embalajes de paquetería que recibimos, añadiendo un elegante papel de regalo quedará muy resultón.
Para evitar caer en un popurrí de adornos navideños, te recomendamos que elijas un tema y un estilo en concreto: árbol nórdico, clásico, vintage, sostenible, estampados de cuadros escoceses, adornos de fieltro, de madera… Por supuesto, deja que los niños se explayen diseñando los suyos. Con unas bonitas pinzas de madera podrás colgarlos en el árbol. ¡Se lo querrán enseñar a todos los invitados!
Por último, recuerda ubicar tu árbol en el mejor sitio de la casa, donde luzca en todo su esplendor navideño y, lo más importante, que quede muy a mano de Papá Noel y Sus Majestades de Oriente.