La arquitectura domótica es la aplicación de la tecnología para el diseño de los espacios, con el objetivo de mejorar el confort. Su desarrollo ha sido posible gracias a la evolución de las comunicaciones inalámbricas y la robótica, que permiten el control remoto de elementos automatizados como electrodomésticos o luminarias. Según las estimaciones del Informe de Datos de Cotización, los expertos del sector apuntan que en España la domótica tendrá un crecimiento del 300% hasta el año 2024. Un hogar inteligente es más cómodo, seguro y está mejor adaptado,pero además ayuda a disminuir el gasto
A continuación, te contamos cómo convertir tu hogar en una casa inteligente con la utilización de la arquitectura domótica.
Desde hace algunos años convivimos con los asistentes de voz, ya sea a través de nuestros móviles, con Siri, o mediante altavoces, como Alexa, que nos ayudan con tareas como recordar fechas, agendar actividades o poner música.
La consulta realizada de viva voz es respondida por un motor de búsqueda o un asistente digital, una inteligencia artificial que permite al programa de software reconocer el lenguaje y responder a nuestras peticiones.
Hoy día podemos crear un ecosistema inteligente en nuestro hogar a través de estos asistentes de voz, que encontramos no solo en móviles o altavoces, sino también en Smart TV, ordenadores y Smart Watch, con los que podremos controlar los dispositivos de nuestro alrededor a través de aplicaciones.
Llegar a casa y encontrar la temperatura perfecta es posible si convertimos nuestro hogar en una casa inteligente. Con la instalación de un sistema de automatización completo podemos controlar las funciones de calefacción de nuestro hogar desde el móvil o desde nuestro asistente de voz.
Existen varios tipos de controladores de temperatura, ON/OFF. Por un lado, el sistema proporcional, que disminuye la temperatura cuando llega al límite marcado, y, por otro, el sistema PID (Proporcional Integral Derivativo), que garantiza la eficiencia máxima del control de temperatura en nuestro hogar sin grandes oscilaciones.
Estos sistemas pueden ir acompañados de sensores de temperatura y humedad además de un sistema de previsión meteorológica y son capaces de recordar nuestras necesidades y costumbres, hasta llegar a programarse de forma autónoma.
La arquitectura domótica nos hace la vida más fácil: frigoríficos capaces de hacer la lista de la compra, cafeteras que nos preparan el café justo a tiempo, lavadoras que saben cuál es la cantidad justa de detergente en cada lavado, lavavajillas que nos envían mensajes para que compremos abrillantador o microondas y hornos programados mediante la voz.
Los electrodomésticos inteligentes mejoran nuestro día a día y nos permiten sacarles el mayor rendimiento de forma sostenible. A través de aplicaciones móviles podremos manejarlos y tener un control exhaustivo de lo que necesitamos en casa, además de realizar las tareas sin esfuerzo.
La domótica nos ofrece la posibilidad de controlar por completo la iluminación de nuestra casa a través del dispositivo móvil o con un asistente de voz.
La iluminación inteligente se adapta a las necesidades y circunstancias concretas de cada momento teniendo en cuenta factores como la hora o la luz natural. A este respecto, elementos como bombillas inteligentes, que pueden regular la intensidad de la luz, tiras de LED, que ambientan las estancias, o luces, que se activan con el movimiento, harán posible un uso eficiente de la energía.
La tecnología con la que contamos actualmente nos permite proteger, controlar y vigilar nuestra vivienda con una aplicación instalada en cualquiera de nuestras pantallas. Además del tradicional sistema de videovigilancia, hay más opciones de seguridad que pueden hacer de nuestro hogar un lugar más seguro:
Aspectos como la tranquilidad en el hogar, la mejora del consumo energético, el confort o la sostenibilidad son solo algunas de las ventajas que nos aporta la arquitectura domótica. En conjunto, sus efectos se traducen directamente en la mejora de nuestra calidad de vida.