Es hora de poner rumbo a la nueva casa, pero antes nos esperan un sinfín de preparativos, pues no es fácil empaquetar los muebles y utensilios de nuestra vivienda anterior. Sin duda, es uno de los momentos más temidos por todos, dado que puede ser abrumador y en ocasiones no sabemos ni por dónde empezar. Te proponemos una serie de consejos de mudanza para que todo vaya sobre ruedas.
Eso sí, no olvides notificar tu cambio de dirección a tus seres queridos y realizar los cambios en los documentos oficiales como el DNI o el carnet de conducir.
Resulta obvio que aunque estamos ilusionados ante el inminente traslado a un nuevo hogar, también afloran el estrés y los nervios, puesto que hay mucho trabajo por delante después de comprar una casa. Pero, como decíamos, la tarea puede ser mucho más sencilla si tenemos en cuenta los tips para mudanza que describimos a continuación:
Carece de sentido que te lleves a tu nueva casa los trastos inservibles que poco o nada te van a servir en tu nuevo hogar. De hecho, es muy probable que los hayas almacenado durante años sin molestarte en tirarlos y, por fin, parece que la mudanza es el momento oportuno para ponerte con ello.
Si es posible, vende o dona aquello que pueda reutilizarse y se encuentre en buenas condiciones. Ya sabes la importancia de la sostenibilidad de nuestras acciones.
No te decantes por contratar la empresa de mudanzas que primero te salga al paso. Aunque somos conscientes de que puedes tener prisa por mudarte cuanto antes, no conviene encomendar la tarea a cualquiera, ya que antes conviene consultar diferentes presupuestos por el mismo servicio. Quizás no lo sepas, pero pueden darse diferencias sustanciales en cuanto a precio e incluso calidad en el trabajo. ¡Recuerda que les vas a confiar muchos de tus bienes más preciados y queridos!
Está claro que la planificación es la clave del éxito en cualquier tipo de mudanza. Así que toma nota de los consejos que detallamos a continuación para que la misión se salde con éxito.
Deberás planificar si la mudanza va a ser en un solo día o en varios. Qué debes llevar primero y qué dejar para el final. Con todas estas ideas claras, lo tendrás más claro cuando empieces a transportar cosas.
Antes que nada, necesitas adquirir las cajas de embalaje que precisas para la tarea. Existen cómodos packs que podrás comprar en cualquier gran superficie o tienda especializada. Recuerda hacerte con cinta de embalar o americana por si tienes que precintar algunas de ellas. Por supuesto, no olvides el material de etiquetado para saber qué hay en cada caja.
Aquí viene lo más peliagudo del asunto ya que incluso es muy probable que tengas que desmontar algún mueble. En este caso, ten cuidado, dado que es muy fácil perder alguna pieza. Ten la precaución de meter los tornillos y las piezas pequeñas en bolsas de plástico y dejar bien claro a qué mueble pertenecen para cuando tengas que volver a montarlos. No confíes en tu memoria porque suele fallar en momentos de tanto caos y estrés. Recuerda, asimismo, hacer una lista de tus bienes antes y después de la mudanza, sobre todo en el caso de los objetos de valor como joyas.
Procura disponer de cajas de diversos tamaños para aprovecharlas y que te se ajusten de la mejor manera posible a su contenido.
No te excedas con el peso, pues se pueden desfondar las cajas y, además, te puede resultar muy incómodo moverlas de un lado a otro. Si quedan huecos y no quieres que baile su contenido, puedes emplear papel, trapos o cualquier otro elemento que permita amortiguar los posibles golpes que sufra durante el transporte en el camión de mudanza.
Podrás etiquetarlas y especificar con un rotulador cuál es su contenido y a qué habitación va destinada. Así, por ejemplo, si se trata de libros, podrás indicar claramente que los trabajadores de la empresa de mudanza deben dejarla depositada en el salón o en el despacho. Si es la vajilla o la cubertería, rotula que deben ir a la cocina. Sin duda, este gesto tan sencillo te facilitará mucho la tarea.
Puedes recurrir a las bolsas de basura en el caso de la ropa, pero no te excedas porque es fácil confundirlas.
No solo las cajas son válidas para una mudanza. Si vas a trasladar cajoneras, mochilas u otros útiles donde dentro cojan cosas, aprovéchalos para meter ropa o cualquiere cosa y así aprovechar todo el espacio posible. Por ejemplo, aprovechar el mueble de la entradas para meter las cosas que hay sobre él o cerca de él. Las mesitas de noche no es necesario vaciarlas, puedes trasladarlas con lo que tengan dentro.
Sé muy cuidadoso contratando la agencia de mudanzas e incluso suscribe un seguro para evitar sorpresas desagradables una vez en la nueva casa.
El plástico con burbujas es estupendo para proteger nuestras piezas más delicadas, pero quizás no sea el más ecológico. Prueba a reemplazarlo con cartón corrugado que se elabora mediante papel kraft de reciclaje, con unas máquinas que lo comprimen hasta conseguir un papel arrugado y flexible que es perfecto para colocar en el interior de las cajas de cartón e impedir que el producto del interior pueda moverse durante el transporte.
¿Qué se guarda primero en una mudanza?
Si quieres más consejos para una mudanza exitosa no olvides que primero hay que guardar lo que menos usamos a diario. Comienza empaquetando los artículos no esenciales como libros, revistas, discos, fotos, obras de arte, objetos de decoración o ropa fuera de temporada.
¿Cuándo empezar a empaquetar para una mudanza?
Debes empezar a organizar una mudanza con al menos una o dos semanas de antelación. No conviene comenzar antes porque es probable que acabes necesitando algo de lo que ya has guardado.
¿Qué no llevar en una mudanza?
Ya explicamos que el primer paso de toda mudanza consistía en desprenderse de todo aquello que ya no nos sirve. Carece de sentido que gastemos esfuerzo y dinero trasladando esos objetos a la nueva vivienda.
¿Cómo se planifica una mudanza exitosa?
Por si acaso surge algún imprevisto, te recomendamos que lleves lo esencial contigo cuando realices la mudanza. Un inventario te ayudará a asegurarte de que nada se ha extraviado.
¿Por dónde empiezo a ordenar para una mudanza?
El desorden nos causa estrés, pero cuanto antes nos pongamos con ello, ¡mejor! Una vez en la nueva casa, te recomendamos comenzar la cocina y el baño. Después prosigue con las habitaciones y concluye con el salón.
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